Es un andamiaje lograr subir a la montaña, cada peldaño constituye el conocimiento facilitado durante este y otros cursos de Semiología, muchas gracias por darnos las herramientas para fortalecernos como personas. Subir sin miedo, saber emplear l...
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Es un andamiaje lograr subir a la montaña, cada peldaño constituye el conocimiento facilitado durante este y otros cursos de Semiología, muchas gracias por darnos las herramientas para fortalecernos como personas. Subir sin miedo, saber emplear la biblioteca en lugar de hacerle caso al jardinero que se mete al cuartito a decirnos que no podemos o que no es el momento. Gracias por tantos tips, tanta información, tantos ejemplos de la vida empleados como bisturí para sacar la energía estancada de cada herida de nuestra infancia. Todas esas heridas nos convierten en la persona que hoy somos, ya sin vejigas para nadar, ya sin muletas, ya podemos caminar sin juzgarnos, sin ser nuestro propio verdugo, entonces la paz de la contemplación se apodera del ahora. El ahora con sus largos segundos, respirados, placenteros, silenciosos, virtuosos. Gracias a nuestros facilitadores Ernesto y Erika. y al fundador de la Semiología, que bueno que existen. Que sigan ayudando a sanar las heridas de nuestra sociedad. Construir para trascendernos a nosotros mismos. Sin miedo al presente, al mañana, a la muerte. Saber morir, saber vivir. Abrazo conectado.
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